Chuletas rellenas en salsa

Esta receta fue una de las primera que hice, no sé los años que tendría, pero me recuerdo perfectamente en la cocina abriendo las chuletas. Después creo que sólo la hice un par de veces y ayer volví a acordarme de ella.



Ingredientes (para dos personas)
4 chuletas de cerdo gruesas
40 gr. de queso curado en lonchas
50 gr. de jamón dulce
2 dientes de ajo
1/2 cebolla
1 cucharada de harina (que se me olvidó en la foto)
50 ml de vino blanco
aceite y sal



Para empezar abrimos las chuletas en dos, como si fuera un libro, unido por el hueso.

Esto siempre se lo podemos pedir al carnicero que nos lo hace en un minuto y nos ahorra el trabajo.



En el interior ponemos las lonchas de queso.



Cerramos y cosemos la chuleta con bramante o cualquier hilo adecuado para la cocina.



En un mortero machacamos un diente de ajo y



rebozamos las chuletas con él. Las dejamos reposar durante 15 minutos.



Mientras tanto preparamos el resto de ingredientes:
Picamos finita la cebolla




Y en cuadraditos pequeños el jamón.



Machacamos en el mortero el otro diente de ajo desleído en el vino blanco



Pasados los 15 minutos, quitamos el ajo sobrante de las chuletas y las salamos. A continuación las doramos en una sartén con un chorro de aceite.

Luego las reservamos y preparamos la salsa


Para la salsa ponemos la cebolla en una sartén con un poco de aceite a pochar.



Cuando esté blandita añadimos el jamón, subimos el fuego un poco (fuego medio) y lo dejamos un par de minutos, removiendo de vez en cuando.



Añadimos la cucharada de harina y le damos unas vueltas para que dore ligeramente.



A continuación echamos el ajo y vino blanco y subimos un poco más el fuego.



Añadimos un poco de agua caliente para aligerar la salsa.



Dejamos la salsa un minuto a fuego fuerte, incorporamos las chuletas y bajamos el fuego.
Las chuletas tienen que hacerse a fuego lento, durante unos 15-20 minutos, depende del grosor, hasta que estén tiernas.



Las sacamos de la salsa y esperamos cinco minutos para no quemarnos. Quitamos el hilo y servimos con la salsa.